FUEGOS DE ARTIFICIO

"Troya" es la última gran super-producción de Hollywood, tan espectacular como vacía. En los últimos tiempos parece que ha vuelto la moda al cine de las reconstrucciones históricas, de las películas de larga duración con miles de extras y decorados que disparan presupuestos desorbitados, es el intento tal vez de recuperar el cine clásico pero con el lenguaje cinematográfico moderno. Ese extraño cruce hace que la gente acuda a los cines en masa, el éxito está casi asegurado (los ingresos en taquilla también) y poco importa entonces a los grandes estudios que la película pase a los anales de la historia como lo hicieron las películas en las que se inspiran. Tampoco hay que rasgarse las vestiduras, no creo que nadie en su sano juicio esperase encontrarse con esta película una obra maestra.

Dejando atrás las posibles licencias históricas y la controvertida adaptación (manipulación) de "La Ilíada" de Homero, el análisis estrictamente cinematográfico de la película nos llevaría a decir que la película es excesiva en sus planteamientos y tímida en sus ofrendas.

La trama de "Troya" a grandes trazos se inicia en el banquete que ofrece el rey de Esparta a Héctor, príncipe de Troya, para formalizar la paz entre los dos reinos, pero todas esas buenas intenciones se vienen abajo cuando Paris, hermano de Héctor, conoce a Helena, esposa del Rey, y ésta se fuga con él hacia Troya, lo que desata la ira de los griegos que deciden enviar sus ejércitos entre los que destaca un guerrero invencible llamado Aquiles.

Vista la película, la trama parece una mera excusa para realizar el despliegue técnico que requieren las batallas en este tipo de cine, y digo esto porque el guión es débil, simplón y previsible, sin margen para la sorpresa.
El pulso narrativo de Wolfgang Petersen (autor de "joyas" como "La historia interminable", "Estallido", "Air Force One" y alguna película interesante como "La noche de los cristales rotos" y "En la línea de fuego") tampoco ayuda al ritmo del film que por ejemplo ostenta una primera parte auténticamente soporífera hasta el inicio de la primera batalla. No nos engañemos, lo mejor de la película son las batallas (y la escena de los barcos surcando el mar Egeo hacia Troya), aunque resulta curioso comprobar que después de tanta ostentación y tanto extra degollado, la mejor escena de lucha sea esa que enfrenta en un cuerpo a cuerpo a los personajes de Héctor y Aquiles, sin tanta stedycam mareante ni recursos digitalizados.

Las peores escenas son las del principio, con diálogos para dormir camellos y el momento en que se tiene la idea de construir el caballo de Troya que da un poco de risa. La estela épica dejada por "Gladiator" parece salpicar este film incluso en su banda sonora y es que James Horner (que ha compuesto la música, sustituyendo al inicialmente previsto Gabriel Yared cuando a éste le rechazaron la suya) parece haberse inspirado en la misma incluyendo en algunos temas la voz de Tanja Tzarovska que tiene un timbre muy similar al de Lisa Gerrard que puso la voz a los temas de Hans Zimmer para la película de Ridley Scott y que le otorgan a este film una atmósfera sonora muy similar.

En cuanto al cásting, sería discutible la elección de Brad Pitt como Aquiles, ya que en ningún momento logra la profundidad psicológica del personaje. Brad Pitt es un actor con defensores/as (sobretodo /as) acérrimos/as y con detractores igual de apasionados, lo cierto es que es un actor capaz de sorprender y convencer al más pintado en papeles secundarios o cuando comparte el protagonismo con otro actor en películas de bajo presupuesto o indepentientes, normalmente en papeles oscuros y marginales, yo destacaría sus interpretaciones en "Seven", "El club de la lucha", "Kalifornia" o "Snatch. Cerdos y Diamantes", pero que también es capaz de exasperar y de provocar salpullidos cuando le tocan papeles de absoluto protagonista, héroe o el bueno guaperas de la peli, en este apartado destacaría sus (nulas) interpretaciones en "Leyendas de Pasión", "Entrevista con el vampiro", "Siete años en el Tibet" y "¿Conoces a Joe Black?". Su papel en "Troya" se situaría en este segundo grupo, aunque por suerte no llegaría al "top".

Del resto del plantel de actores destaca sin duda Eric Bana como Héctor (espléndido en su comedida interpretación, un actor con mucho futuro y que es el verdadero héroe de la historia), Orlando Bloom como Paris (al que aquí ni sus amigos los elfos soportarán), Diana Kruger como Helena (cuyo único mérito interpretativo en esta peli es ser guapa), Peter O'Toole como Rey Príamo (la vejez de los actores ingleses siempre es espléndida), Saffron Burrows como Andrómaca (un actriz con un talento envidiable y que la industria finalmente parece haber descubierto, pese a lo breve y soso de su papel) y Rose Byrne como Briseida (en su primer papel reseñable y que se come con patatas cada escena que comparte con Pitt, habrá que seguir su pista con interés).

En fin, el resto de apartados como pueden ser los decorados, la ambientación, el vestuario, etc, son magníficos, pero cuando sales del cine te sabe a poco y te marchas a casa preguntándote si valía la pena invertir ese presupuesto para el resultado final. Recomiendo el film a los devoradores de palomitas, fans de Pitt, fanáticos de las reconstrucciones históricas (a los que no importe la Historia) y buscadores de batallas espectaculares, al resto de espectadores les recomiendo que se queden en casa viendo una peli de video.

U.C. (Daniel Farriol)