UC - Críticas
País: USA. |
SUAVEMENTE ME MATA
"Tenderness" es un decepcionante cruce entre "thriller" de psicópatas y drama de adolescentes perdidos que parte de la sugerente idea de la obsesión de una chica de 16 años por un psicópata y como busca desesperadamente darle un sentido a su vida estando a su lado. La lástima es que el guión a partir de ahí dará bastantes palos de ciego y la puesta en escena del director John Polson tampoco ayudará, y es que no en vano Polson tiene en su haber el dudoso honor de haber realizado una de las peores películas de terror contemporáneo contando con uno de los mejores repartos que recuerdo para una película de género en el "El escondite".
El detective Cristofuoro es un veterano policía obsesionado con el caso de Eric Komenko, un joven que acaba de salir de prisión tras cumplir condena por el asesinato de sus padres. Eric Komenko también ocupa los pensamientos de Lori, una problemática adolescente que se siente irremediablemente atraída por él desde que presenció un extraño suceso años atrás. Lori se presenta por sorpresa en la vida del joven, determinada a acompañarle allá donde vaya, a pesar de las advertencias del detective Cristofuoro, quien, convencido de que Eric es un asesino en serie que pronto volverá a actuar, no dudará en seguir sus pasos.
Esta vez Polson también contará con un par de actores de relumbrón como Russell Crowe y Laura Dern, aunque salen menos de lo esperado, siendo los verdaderos protagonistas del film los desconocidos Jon Foster y Sophie Traub. Ninguno de ellos está especialmente brillante, pero Crowe que reconozco no es santo de mi devoción está bastante mejor de lo habitual en su papel de detective amargado y obsesionado con el asesino en un personaje que probablemente si se hubiera desarrollado un poco más hubiera sido beneficioso para el resultado global del film.
La película navega sin definirse entre el "thriller" y el drama, pero sin suficiente suspense ni emoción, terminando por atraparnos en su tedioso ritmo y dejarnos en la más completa indiferencia cuando llegamos al "clímax", convirtiéndose en un producto más cercano a un telefilm de sobremesa que a un film estrenable en pantalla grande, de hecho su estreno ha sufrido un comprensible retraso en nuestro país.