NINO ROTA
SABOR ITALIANO
Siempre hemos asociado la violencia con sonidos que nos sacuden bruscamente, para sorprendernos. Estallidos fuera de control que sirven para mostrarnos una conducta asociada a la maldad. Este criterio que mi mente asociaba a la violencia cambió cuando escuché la música que Nino Rota compuso para el “El Padrino”.
Pero a Nino Rota no sólo hay que recordarle por esta gran banda sonora en la que unas composiciones nos ponen en la piel de una familia mafiosa, sino por su relación con grandes directores italianos como Federico Fellini. Así que comencemos nuestro camino para conocer la vida de este gran compositor.
Nacido en Milán (Italia) el 3 de diciembre de 1911. Empezó a estudiar piano y solfeo a la edad de 8 años. En 1923 ingresó en el conservatorio de Milán, donde destaco por su precocidad ya que a la edad de once años compuso una oratoria, y a los trece, compuso una comedia lírica en tres actos “il Principe Porcaro (1925)".
De 1937 a 1938, impartió clases de teoría y solfeo en la escuela de música Taranto. A partir de 1939 fue profesor de armonía y después de composición del Bari Liceo Musicale, y en 1950 pasó a ser su director, cargo que ocupó hasta 1978.
De su dilatada carrera como compositor la que más nos interesa es la que comenzó a desarrollar en el cine a partir de los años 40 de manera continuada. Trabajó con todos los cineastas más importantes de su época: King Vidor, Luchino Visconti, Franco Zeffirelli y especialmente Federico Fellini.
Rota coincidió con Fellini en un par de filmes en el que éste era coguionista y su primera colaboración directa se produce en 1952 en “El Jeque Blanco”, segunda película de Fellini.
"El Jeque Blanco"
Rota compone una música con reminiscencias circenses que subraya el carácter grotesco de los personajes. El resultado es muy satisfactorio para Fellini y al año siguiente colabora en “Los Inútiles” donde acentúa un perfil musical más dramático en el retrato de seres superficiales.
A partir de allí se establece la complicidad creativa entre ambos. En “La Strada (1954)”, por ejemplo, no se concibe a la protagonista, genialmente interpretada por Giulietta Massina, sin esa música detrás que va enmarcando su evolución.
"La Strada"
En “El Estafador” (1955) introduce elementos de Jazz que calzan a la perfección en esa historia de pequeños y patéticos timadores. Continúa con “Las Noches de Cabiria”(1956), donde Rota pone un telón de fondo musical a esa prostituta ingenua, engañada, mediante melodías alegres, bailables, pero falsas, inconsistentes, como las ilusiones de esa pobre mujer. Vuelve al Jazz e incorpora aires de Blues en “La Dolce Vita” (1969) como marco de ese fresco de las clases aristocráticas vacuas e indolentes.
"La Dolce Vita" (Finale)
En la obra más autobiográfica de Fellini, “Ocho y Medio” (1963) Rota incorpora a la banda sonora fragmentos de música clásica, a parte de una magnifica composicion propia. “Julieta de los espíritus” (1965) es el tributo de Fellini a su esposa, Giulietta Masina. Rota aporta a ese homenaje amoroso unos sones basculantes entre el Jazz y el Swing con agregados de música electrónica.
Siempre fascinado por el mundo del circo, Fellini dirige “Los Clowns” (1970), cálido homenaje a ese universo. Esta vez su compositor preferido incluye en la banda sonora temas ya escuchados en otros filmes anteriores de índole circense. Festivos y nostálgicos que dejaron totalmente agradecido a Fellini. Otro homenaje es “Roma“ de Fellini (1972), en esta oportunidad dedicado a la ciudad que lo cobijó y le dio trascendencia. Rota solo compuso música que acompañó funcionalmente las imágenes, destacándose nítido, el tema machacón y repetitivo del desfile de moda de indumentaria religiosa, la secuencia más alucinante del film.
“Amarcord” (1973) es la evocación de la juventud de Fellini, ambientada en Rímini, su pueblo natal, trata con amor y nostalgia a sus gentes y sus circunstancias. Rota interpreta cabalmente los sentimientos del director y le regala su mejor partitura con un tema central melancólico e inolvidable y no solamente a él sino a todos los mortales.
Para “El Casanova de Fellini” (1976), Nino Rota toma elementos de la música africana, árabe y asiática, componiendo una partitura compleja. La última colaboración se produce en “Ensayo de Orquesta” (1978). En su despedida, Rota despliega todo su conocimiento clásico componiendo la totalidad de esos breves tramos de música que ensayan los protagonistas.
Creo que estas palabras de Fellini definen perfectamente la relación de dos genios del cine: “Mi predilección por Rota como músico se basa en que le encuentro muy próximo a mis temas y a mis historias, y en que trabajamos juntos (no me refiero a los resultados sino al modo de trabajar) muy bien. No le sugiero los temas musicales porque no soy músico. Sin embargo, como tengo una idea bastante clara de la película que estoy haciendo, incluidos los detalles, el trabajo con Rota se efectúa exactamente igual que la elaboración del guión. Me pongo cerca del piano en el que se instala Nino y le digo exactamente lo que quiero. Naturalmente, no le dicto los temas, solo puedo guiarle y decirle justamente lo que deseo. De todos los músicos que trabajan en el cine él es, a mi parecer, el más humilde”.
Dejando aun lado su relación con Fellini tenemos que destacar otras composiciones suyas como la que compuso para Lina Wertmuller en “Amor y Anarquía”, Rene Clement en “A pleno sol”, “Romeo y Julieta” de Franco Zeffirelli y para Luchino Visconti la magnifica “El gatopardo”.
"El Gatopardo"
Nino Rota falleció el 10 de abril de 1979 y no podría terminar este articulo sin recordar la película con la que empecé a describir a Nino Rota y no es otra que “El Padrino”. Coppola le lanzó el guante para que con su música, Rota describiera a una familia mafiosa que estaba condenada a un destino fatal de muerte y violencia. Y este no le defraudó realizando una composición magnifica.
“El padrino” es una de las bandas sonoras que están en la memoria de cualquier persona que ama el cine, además de que fue un gran éxito comercial. Ganó el Globo de Oro en su momento, pero no así el Oscar porque conocido tema “Love Theme” no era una pieza original pues Nino Rota ya la había utilizado en una película en 1958. Aun así ganó dicha estatuilla por “El padrino II”.
"El Padrino"
La verdad es que cuanto más escucho estas dos composiciones, más ganas me dan de convertime en mafioso para tenerlas como banda sonora de una vida.
UC (Carlos Martínez Conejero).